A veces esta bueno idealizar

Pocas veces recomendaría idealizar y una de esas pocas veces es indiscutidamente enamorarse en el colectivo, creo que es algo muy sano, pero no hablo de esa hermosa mina que viste subir y te encanto cuando ibas en el 28 de paseo por ahí, te hablo de esa que ves siempre, con la que ilusionas e imaginas, por la que haces pelotudeces para que ella te note o por lo menos para que sepa que estás ahí, es como ser de nuevo un pendejo que se pone nervioso y no sabe qué carajo hacer, la situación es genial por que es perfecta tal como está, no queres conocerla, queres quedarte con lo la forma de ser que pensas que tiene, con el olor que pensas que tiene, con la forma de hablarte que imaginas, el saber a quién le manda mensajes todos los días o saber cómo será su día, creo que mataría el momento, mataría la idealización tan sana que tenemos de alguien, alguien que creemos que si es así como nos imaginamos seria alguien necesario, pero la probabilidad que eso sea así, sabes bien que es casi nula, o en otros casos más difícil que la mierda.

A mí me pasa decenas de veces al día, mis días son muy congeniables con los de las demás personas al parecer, tengo varias idealizaciones a lo largo del día, en el viaje a la mañana, en el laburo, a la hora de ir a comprar algo para desayunar, a la salida, siempre, y lo más interesante son las miradas que cruzamos, como conociéndonos, como confirmando que sabemos la existencia el uno del otro, quizás no piense lo que yo pienso de ella, pero con esa mirada algo reacciona en ella, quizás un “Uh este es el pelotudo del bondi” o quizás no, pero es bueno, con otras ni siquiera notan que compartís un espacio muy chiquito del día hace años con ella, y esas idealizaciones son más… como decirlo…“aventuradas”, viajar entre un quilombo de gente y cruzar miradas, es como personal o por lo menos lo tomas así.

Y viajas más cómodo aunque estés incómodo, el viaje se te hace mucho más corto, por que lo bueno dura poco, cuando te acordaste de disfrutar ya tenes que bajar o ya se bajó hace rato, cuando se le cayó algo al piso y se lo levantaste, cuando se te olvidaba el boleto o las monedas y te lo alcanzo, cuando le dejaste el asiento o cuando te lo dejaron a vos, cuando se sentaron juntos, haciendo de cuenta que eran dos desconocidos cuando eran más que eso, pero no eran ni siquiera eso, cuando viajaban parados uno al lado del otro apretados a mas no poder y vos tratando de no incomodarla mucho, aprendí que cosas como esas son muy necesarias,  me dolería tener que cambiar de rutina y dejar de verlas, pero sé que encontrare otras y ellas a otros, por que si un día no nos cruzamos nunca más, sería el fin más digno, lógico y esperado de esa  historia.

A veces tratas de averiguar cosas, prestando atención a los detalles, a la ropa que lleva, el lugar donde baja, el estado de ánimo que se le nota en la cara, crees saber leer a alguien que no conoces, está bueno, a mí me entretiene, por lo menos pensar en alguien al menos unos minutos al día, a veces te llama la atención que tienen cosas en común, los dos viajan leyendo, les gusta la misma música o tiene un estilo que es familiar, puede ser cualquier cosa y lo más loco es que no pensas en nada sexual, no escribo de este tipo de calentura, escribo de otra cosa, lo más básico, tener pequeños enamoramientos diarios, a veces esta bueno idealizar.

Y quien podría decir que sería tan linda forma de inspiración

=)

Nec